Portada y fecha de Hemos venido a jugar

¡Miércoles Addams!

Estamos en plena ola de calor. Socorro.

    ¿Qué tal? Yo contentísima, emocionada, ilusionada y muy agradecida. Ayer publiqué la que será la portada de mi proximo libro y estoy flipando con la acogida, en serio. 

    Hemos venido a jugar es la historia de Sophie, la hermana pequeña de Cassandra de Inevitables. Son historias independientes aunque recomiendo leerlas en orden para no comerte ningún spoiler. 

    El 15 de septiembre es la fecha elegida para que Sophie vea la luz. Todavía falta, lo sé, pero agosto es un mes medio muerto y tocaba anunciar las cositas en julio. Muy pronto os enseñaré la sinopsis, pero ahora os cuento cosas varias sobre la portada.

    Me flipa. A mí todo lo que sea lila, morado, violeta o púrpura es que me chifla. Tenía claro que quería este color para ella, ya sabréis por qué, pero no fue fácil dar con el diseño. Al principio buscaba algo mucho más colorido y loco, algo que representara su personalidad. Hice muchas pruebas (pero muchas) y finalmente, como de casualidad, encontré este maravilloso fondo. Le subí los tonos para que estuviera todavía más rosa y más morado. Después encontré las estrellitas en tono de dorado y supe que también tenían que estar. La silueta de la chica saltando la tenía clara desde el principio, jeje. Luego llegó el turno de las letras y tocó hacer muchas pruebas también. Ninguna me convencía. Fue mi amiga, compañera y escritora Selva Palacios quien me dio la idea de jugar con diferentes tipos fuentes y ese fue el detalle que la hizo redonda. Gracias por eso, amiga.

    También tengo la contraportada, pero os la enseñaré junto a la sinopsis y, espero que no dentro de no mucho (cuando ya tenga todo maquetado y listo), os pueda enseñar también la cubierta al completo, que esto siempre me da más de un quebradero de cabeza porque el señor Amazon es muy exigente y no acepta cualquier cosa. Para él un milímetro de más o de menos es un no y yo enloquezco en general, pero en este paso especialmente.

    Y eso sería todo. Que aquí teneis a la loquilla de Sophie saltando y volando entre pájaros, nubes y estrellas. Que me muero de ganas de que la conozcais, pero antes, disfrutemos del verano. O suframos con él, dependiendo de en qué parte del mundo te encuentres jeje.

¡Nos vemos el miercoles que viene!