miércoles, 14 de octubre de 2020

Mi último proyecto


     ¡Buenos días de miércoles! (cuando comencé a escribir este post era medio día. Otro miércoles que voy tarde). Hoy toca actualización y contaros de una vez cositas sobre la última novela que he escrito (que no es la que está a punto de salir a la venta con la editorial Kamadeva, "La chispa adecuada"). Esta historia surgió después de terminar con La chispa adecuada. Justo cuando me dije a mí misma que no me iba a poner con ninguna historia hasta que repasara las anteriores. Pero ocurrió algo... Vi una peli, quedé prendada de un actor y ¡boom!, la historia empezó a tomar forma en mi cabeza. 
   
 Tengo que decir que por primera vez traté de hacerme un esquema mental con ideas, conceptos y tramas que quería que estuvieran en el libro. Elaboré muy bien los personajes antes de comenzar aunque luego sobre el papel van adquiriendo su propio carisma, pero en principio, tenía muchas cosas claras y eso es algo que no había hecho hasta ahora. Por supuesto, me dejé llevar pues no podría escribir si no me siento totalmente libre (por eso no concibo hacer una escaleta; de momento) y estas ideas fueron encajando y a día de hoy, me siento muy orgullosa del resultado. 

    Se trata de la historia de Cassandra y Oliver. Ella es una chica de 26 años y él está a punto de cumplir los 20. Sin hacer mucho spoiler, puedo decir que esta diferencia de edad será clave para ellos. Cassandra viene de una familia bien, trabaja como abogada, es una belleza de pies a cabeza y un poco pija, para qué negarlo. Tiene una hermana un poco (muy) excéntrica que se llama Sophie, de la misma edad de Oliver. Por otro lado, está Lara, la amiga de carrera de Cassandra y próxima compañera de piso. En medio de todo esto, no os he dicho que Cassandra tiene novio. Bueno, ella dice que no son pareja, pero Nacho está demasiado entregado. Por cierto, el no novio es amigo de la infancia de Oliver... ¡Ah! Y también está Javi, el otro amigo de Oli, un torbellino con algún que otro secreto... A todo esto, no os he dicho nada de Oliver más que su edad. ¿Confirmamos que se ha convertido en uno de mis protas masculinos favoritos? Confirmamos. Oliver es un profundo de la vida, un intenso, un artista con un alma vieja, como él suele decir. Su talento innato es el dibujo y pretende ganarse la vida con ello. ¿Un soñador? Ya lo creo. Y un valiente. Ains, ya paro porque podría llenar un folio entero hablando de él. 

    La historia trascurre en Madrid y al ser seis personajes, todos con su propia trama mezclada con la de los demás (sí, hay salseo del bueno) me ha resultado algo más complicada de escribir que el resto de mis libros. De hecho, tengo lo que sería un primer borrador, mi lectora cero me ha pasado sus impresiones y tengo claro que habrá que cambiar cosas. Por una vez, voy a dejar la historia reposar y la leeré dentro de un tiempo con más perspectiva, a ver qué tal se me da. También es una cosa nueva para mí y creo que puede ser interesante y necesario. Otra cosa también nueva que me ha pasado con esta historia es que uno de los personajes ha resultado ser tan arrollador que siento la necesidad de continuar su historia desde donde termina esta. Sería algo así como una secuela, spin off o como queramos llamarlo. Una historia completamente diferente pero con uno de los personajes como prota. Me parece que puede quedar muy bien, aún estoy trabajando la idea.
    
    Este sería (el día que tome forma de libro) mi noveno libro y estoy sintiendo muchas cosas nuevas con él. Muchas primeras veces y eso mola. Más adelante os contaré más cositas porque ni el título tengo claro, jeje.

¡Hasta el miércoles que viene!

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